Hablar de contaminación ambiental es referirse a la presencia de sustancias o elementos dañinos para los seres humanos y los ecosistemas (seres vivos) que habitan en el planeta tierra y que, a lo largo de los años ha ido en aumento. Podemos mencionar que existen varios tipos de contaminación entre las que se encuentran: contaminación del aire, contaminación de los suelos y contaminación del agua.
Tipos de contaminación en Ecuador
Los diferentes tipos de contaminación están relacionados con el impacto que puede dejar el ser humano en sus diferentes actividades y la huella ambiental que va dejando en el planeta,
En el país la problemática ambiental está latente, Ecuador es uno de los países con mayor biodiversidad en América Latina, así como de poseer una gran importancia ecológica. Sin embargo, los problemas ambientales se mantienen y uno de los más comunes es la contaminación ambiental.
Entre los principales problemas ambientales que enfrenta el Ecuador están: la contaminación del aire, contaminación del agua, la deforestación, la sobreexplotación de los recursos, la pérdida de la biodiversidad y recursos genéticos, entre otros.
Qué pasa en la Amazonía ecuatoriana?
La Amazonía ecuatoriana en los últimos tiempos viene soportando diversas situaciones de contaminación ambiental, ocasionados por derrames de petróleo, deforestación y extracción minera ilegal, que perjudica la biodiversidad del territorio y la salud de la población de las comunidades que habitan en la región amazónica.
Para monseñor Adalberto Jiménez, obispo del Vicariato Apostólico de Aguarico, la Amazonía está golpeada por tres realidades de muerte: “los derrames de petróleo, la explotación de la minería ilegal – ilegal, la extracción de madera, la deforestación de los árboles y junto a ello la contaminación de los ríos”
La realidad que vive la Amazonía, es una situación de muerte porque las empresas “tanto petroleras, mineras y madereras, ven al territorio amazónico como una tierra solo para depredar y beneficiarse de los recursos y de esta manera se hace un daño a las comunidades indígenas y campesinas”.
Esperanza en la Amazonía
Cáritas Ecuador, trabaja varios ejes temáticos en territorio, uno de ellos es, los procesos de incidencia sociopolíticos y eclesiales para incentivar el cuidado de la Casa Común. Es así que en año 2022, el área de Ecoteología realizó un diagnóstico situacional ambiental y de medios de vida, post-derrame de petróleo en doce comunidades de Sucumbíos y Orellana.
El proyecto se trabajó desde el enfoque del Desarrollo Humano Integral y Solidario, que buscó brindar herramientas y entender la realidad desde la historia, conflictos y actores. Fortalecer a las comunidades para prevenir o estar preparados ante los desastres ambientales.
Según el análisis realizado en dicho diagnóstico, el derrame ocurrido el 7 de abril de 2020, fue uno de los más grandes de los últimos 15 años. Se extendió por las cuencas de los ríos Coca y Napo que imposibilitó los servicios ambientales que ofrecían los ríos como son: recreación, turismo, higiene, alimento y agua. Varias comunidades de las provincias de Orellana, Sucumbíos y Napo resultaron afectadas.
Comunidades afectadas por derrames de petróleo
- En Orellana fueron: Sardinas, San Pablo Norte, Lumucha, San Andrés, San José y Amarun Mesa.
- En Sucumbíos podemos: Playas del río Tigre, Playas del Río Coca, Panduyaku, Wayra Urku y Shiwakucha.
- En Napo: La comunidad de San Francisco.
Es necesario mencionar que el problema hidrocarburífero, la erosión regresiva del río Coca y la escasa planificación territorial, magnificó la situación de vulnerabilidad de las comunidades.
Hasta el día de hoy, la fuerte relación cultural de las comunidades con el agua está rota, al no poder utilizar los ríos para la recreación, ni para sus actividades diarias como alimentación y uso del agua.
Es por ello, que los derrames de petróleo ocasionados por el Oleoducto Transecuatoriano de Crudos Pesados, originó graves desastres ambientales, entre ellos, la contaminación de los ríos, muerte de fauna y flora del lugar y graves afectaciones en la salud de las comunidades que habitan en los territorios devastados.
Las acciones de remediación impulsadas por el Gobierno y las petroleras son insuficientes, no se ha logrado alternativas de restauración de las principales fuentes de alimento y agua para el consumo de la población.
!La minería nos está costando la vida!
Otra de las provincias amazónicas ricas en recursos naturales y que también enfrenta varias afectaciones ambientales, es Napo. Natali Illapa, voluntaria en la pastoral ecológica de Cáritas Napo, indica que la provincia atraviesa varios problemas entre ellos: “la creación de hidroeléctricas, extracción de material pétreo y otras más. Por ahora lo que está costando la vida es la minería tanto legal como ilegal que se arremete contra los grandes ríos: Napo, Jatunyacu y Anzu”.
“El rio Jatunyacu es uno de los más aclamados para practicar rafting en el país. Está ubicado en Tena, dentro del Parque Nacional Llanganates. Su nombre Jatunyacu en quichua, la lengua nativa, significa Río Grande. El paisaje que lo acoge es tan sorprendente que es un atractivo más para atraer visitantes”.
Es necesario mencionar, señala Natali, “que los ríos pequeños y medianos son los que alimentan a los ríos grandes, que “al estar escondidos en la selva se han convertido en presa fácil para los mineros, puedo nombrar al río Chumbiyacu que lleva siendo contaminado por la actividad minera por más de 20 años”.
“Las comunidades asentadas cerca de los ríos minados ya no disponen de fuentes de agua potable, ni para la propia subsistencia y mucho menos para la actividad agrícola y ganadera, ahora se vive del agua lluvia y cada vez es menos frecuente, puedo mencionar al cantón Arosemena Tola”.
La grave situación de Esmeraldas
Y, si eso pasa en las dos provincias amazónicas con la contaminación ambiental por los derrames de petróleo y la minería, revisemos ahora que sucede en la provincia de Esmeraldas, que también experimenta diversos tipos de contaminación ambiental. Las causas de esta contaminación se deben a: la tala indiscriminada de bosques, la minería ilegal, el mal manejo de residuos sólidos, las palmicultoras, las camaroneras y la contaminación de los ríos, así lo menciona el P. José Antonio Maeso, responsable de Cáritas Esmeraldas.
La salud de la población está afectada por los diversos tipos de contaminación ambiental que se registra en la provincia, las comunidades más afectadas se encuentran en los cantones de la zona norte: Eloy Alfaro y San Lorenzo.
El P. Maeso, indica que hay estudios de la Universidad Católica, que habla de la contaminación de los ríos, el mismo que registra altos índices de mercurio en los mariscos y peces. Señala que el informe que realizó Cáritas Ecuador, se ve como los peces están llenos de llagas y úlceras. “Así mismo existen informes que no se han hecho públicos de toda la contaminación que produce la refinería, las enfermedades respiratorias y el agua que produce muchos problemas en la piel y enfermedades gastrointestinales”.
La contaminación ambiental que soporta la ciudad de Esmeraldas, se debe también a la presencia de la refinería y la termoeléctrica que se encuentra en la capital de la provincia y afecta a la salud de sus habitantes con enfermedades respiratorias. El P. Maeso, menciona que existen otras problemáticas como son: la presencia de las camaroneras y los palmicultores.
“La zona norte de la provincia, soporta la minería ilegal y la tala indiscriminada de árboles, en el sur se encuentra las camaroneras y en la ciudad de Esmeraldas se encuentra la presencia de residuos sólidos y de la refinería, enfatiza el P. José”.
Según el documento elaborado por Cáritas Ecuador por el área de ecoteología denominado: Línea Base de los Territorios Correspondientes al cantón Eloy Alfaro en la provincia de Esmeraldas sobre Identidad Territorial e Incidencia Socio Política, «la actividad minera que se ejecuta en dos cantones de la provincia de Esmeraldas como son: San Lorenzo y Eloy Alfaro eta prohibida por medidas cautelares emitidas en 2011 y ratificada en 2018. El Gobierno admite que la presencia de grupos armados irregulares a lo largo de la frontera norte dificulta los operativos de control sobre actividades como la minería ilegal. Sin embargo, la Empresa Nacional Minera (ENAMI) de Ecuador confía en el potencial de un yacimiento de arenas ferrotitaníferas, base para la producción de hierro, en el proyecto Tola Norte. En los próximos años se pretende llegar a una fase de exploración avanzada que incluye el proceso de obtención de la licencia ambiental para el desarrollo del yacimiento. Se han desarrollado estudios geológicos para establecer el potencial de recursos minerales, especialmente de hierro y titanio, de hallarse. Las autoridades opinan que en cantidades suficientes sería un aporte más al cambio de la matriz productiva de Ecuador, con el desarrollo de una industria siderúrgica».
“La presencia de la minería aurífera en las riberas del río Cayapas principalmente ha causado impactos socioambientales que se manifiestan en la muerte de peces y ganadería local, además de enfermedades en los pobladores locales. De acuerdo al artículo publicado por el Comercio el 20 de noviembre del 2020, desde el 24 de marzo del 2011, un juez de la Unidad Judicial Multicompetente de San Lorenzo dictó medidas cautelares que prohíben todo tipo de minería, con el objetivo de que los mineros de oro continuaran contaminando los ríos con metales pesados. El mismo artículo señala que, aunque se destruyeron centenares de maquinas en mayo del 2011, la actividad minera ilegal continuaba (a la fecha de publicación) desarrollándose en parroquias del cantón San Lorenzo”.
“La Pastoral Social Cáritas Esmeraldas, en coordinación con organizaciones locales del norte de Esmeraldas ha venido acompañando un proceso de organización desde las bases, para exigir la garantía de esos derechos humanos violados por la insuficiente acción del Estado ecuatoriano”.
En Loja la contaminación ambiental también trae consecuencias
La provincia de Loja es otra de las zonas que está amenazada por las concesiones mineras. De los 16 cantones que tiene la provincia de Loja, 15 tienen concesiones mineras, solo en el cantón Puyango no hay explotación ni concesión minera.
El P. Enry Armijos, Párroco de Malacatos y miembro de la Red Nacional de Pastoral Ecológica (RENAPE), indica que “la explotación minera empieza con intervenciones ilegales, artesanales y que detrás de esas actividades está el ojo de las empresas, es una acción muy fuerte que se realiza en la provincia de Loja, de manera particular en los cantones Macará y Zapotillo, la actividad minera se puede ver en los dos ríos, de lado y lado en la frontera de Ecuador y Perú”.
Así mismo el P. Enry, indica que se “han dado muchas manifestaciones de rechazo a nivel social y jurídico, varios colectivos se han formado en diferentes lugares para defender los recursos hídricos, como es la Federación de Comunas de la provincia de Loja, el mismo seguro campesino y Cáritas Ecuador que trabaja en cuanto a formación, socialización e información de las consecuencias que trae la realización de la extracción minera. Causa tristeza las dos acciones de protección que se han presentado en defensa de Fierro Urco, la jueza denegó la acción de protección en primera y segunda instancia, dijo que no afecta ningún bien material”.
Al finalizar el diálogo con el P. Enry Armijos, invita a que nos “preparemos en los grupos y de manera personal para distinguir el verdadero rostro de lo que es la minería, para mí me es indiferente, si es legal o ilegal, todo destruye, la una destruye sin el permiso y la otra con la autorización y el respaldo de las autoridades”.
Según un monitoreo de la organización Conservación Amazónica, que se dedica a presentar información técnica y de análisis de la Amazonía andina y que Ecuador es parte de ella, da cuenta de la actividad minera en la zona sureste de la Amazonía ecuatoriana que comprende el Parque Nacional Podocarpus que presenta una extraordinaria biodiversidad y endemismo. En el informe de Conservación Amazónica señalan que, «al interior del parque, se evidencian actividades de minería ilegal de oro que amenazan dicha diversidad. Los sistemas de explotación de este mineral son: a cielo abierto y subterráneo; siendo este último el más utilizado a través de la perforación de túneles. La actividad extractiva de recursos no renovables en áreas naturales protegidas está prohibida. Por ello, al interior del Parque Nacional Podocarpus no se encuentra ninguna concesión minera, y podemos asumir que toda la actividad detectada es de carácter ilegal. Se documenta un aumento notable de la superficie minera al interior del parque desde el año 2012. En el presente reporte, informamos sobre la situación actual durante los años 2021 y 2022 con el uso de imágenes satelitales de alta resolución. Se identificaron 22 sitios en donde se detectó actividad minera, que dan evidencia de que dicha actividad continúa en aumento en la actualidad».
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