En Ibarra, a través de una rueda de prensa, monseñor René Coba y el sacerdote Juan Carlos Flores dieron a conocer las actividades que desarrolla Cáritas en la provincia. La actividad se enmarcó en la celebración por los 60 años de vida institucional de Cáritas Ecuador.
Cáritas es la mano extendida de la Iglesia sobre los más vulnerables
En su intervención, monseñor René Coba, obispo de la Diócesis, recordó la labor de Cáritas en el país y destaco que la pandemia deja una experiencia enriquecedora. «La gente exteriorizó todo lo bueno, pero también lo malo, pero lo más lindo ha sido la solidaridad, pues Dios nos tiene que dar ojos para ver, corazón para amar y manos para compartir».
«Nos duele la violencia intrafamiliar, todo lo que sucede en la salud, cuanta gente se nos ha idos, porque faltan los recursos básicos y Cáritas quiere ser esa mano extendida para los demás, en cada parroquia se está constituyendo Cáritas para que sea esa mano del compartir y presencia solidaria», señalo Monseñor René Coba.
Por su lado, el padre Juan Carlos Flores, director de Cáritas Ibarra, destacó que el trabajo de la pastoral es promover y acompañar las diferentes realidades de la población más necesitada, pues la Iglesia tiene su consistencia de ser la fe, la enseñanza y la caridad donde nace el amor y la ayuda a los más vulnerables. Es así que durante el tiempo de la pandemia se logró llegar con ayuda humanitaria y atender a más de 12 mil familias con kits de alimentos, higiene y medicinas.
Durante la pandemia, la labor pastoral no se detuvo, la ayuda se desplegó en algunos frentes: se creó el Banco de Alimentos entregando 1600 raciones alimenticias a la población local, el comedor Jun Pablo II, sigue dando de comer a la población necesitada. Además la atención no se ha descuidado y se ha llegado a niñas, niños, adultos mayores, personas con discapacidad y población en movilidad humana.
«El voluntariado y la cooperación internacional es parte importante del trabajo y accionar donde se apoya y se asiste a miles de familias con recursos y financiamiento económico, en el territorio», finaliza el padre Flores.
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