FASCA Santo Domingo, con la niñez y la juventud

FASCA (Fundación de Acción Social Cáritas) tiene al P. Euclides Carrillo como su director desde hace más de diez años. El P. Euclides conversó con Myrian Carreño sobre el quehacer de la Pastoral Cáritas en la provincia de los Tsáchilas. Son ya 15 años de un trabajo pastoral duro pero lleno de satisfacciones, con muchos proyectos pero, siguiendo el compromiso de Cáritas, la prioridad es la niñez y la adolescencia.

FASCA tiene un amplio programa de atención a niñas, niños y jóvenes adolescentes a los que les han vulnerado sus derechos; también apoya a la niñez abandonada, a víctimas de maltrato y violación o que viven en situación de pobreza extrema. Aunque esta labor alcanza buenos resultados, es el programa dedicado a niñas y niños desnutridos el que más apoyo genera, y se convierte en un verdadero ejemplo de gestión por la niñez desnutrida en todo el país.

En este mismo sentido, hay un programa dedicado a apoyar a niñas, niños y jóvenes con discapacidades severas. “Con esfuerzo y colaboración, hemos logrado cambiar la mentalidad de padres y madres que creían que tener una hija o hijo con discapacidades era un castigo de Dios. Ahora reciben nuestro apoyo, trabajan con nosotros en la rehabilitación de sus hijos, y les estamos dando una mayor calidad de vida, haciendo de su existencia algo digno”, nos comenta el padre Carrillo.

«También continúa adelante el Proyecto de Soberanía Alimentaria, alentado por las microfinanzas que damos a muy bajos intereses a mujeres que se unen y forman comunidad, para trabajar solidariamente, en pro de una mejor alimentación para sus familias. Apoyamos a estos grupos sociales ofreciéndoles capacitación, formación en prevención de enfermedades y de cómo alimentarse mejor».

Cada parroquia tiene sus propios proyectos:  hay pequeños centros de salud, hay comedores para personas mayores, brigadas médicas y compañía a personas con problemas de salud. En otras parroquias se apoya a migrantes, o hacen programas de ayuda a hijas e hijos de personas privadas de su libertad.

El P. Euclides insiste en que lo poco que han logrado es gracias a la misericordia de Dios y a ayudas fuertes que provienen de Alemania: no solo la Iglesia alemana, sino familias de este país que ayudan a financiar los proyectos de FASCA. Pero el P. Carrillo cuenta que lo más importante es poder comprobar la solidaridad de los propios feligreses de Santo Domingo: se toca a sus puertas, y saben responder con amor y generosidad en beneficio de quienes tienen menos. Agradece también a la Alcaldía y al MIES, que apoyan los programas con niñas, niños y jóvenes.

El P. Carrillo asegura que la participación de la provincia Tsáquila en el Concurso de Cáritas Parroquiales será nutrida, pues hay muchas parroquias con buenas iniciativas, con emprendimientos que, una vez conocidos, alumbrarán la acción de otras Cáritas Parroquiales en todo el país.

Que ese conjunto de voluntades cristianas y conciencias generosas sigan trabajando y cosechando logros en beneficio de la población de Santo Domingo. Felicitaciones al P. Euclides y al grupo humano que hace realidad el ser caricia de la Iglesia a su pueblo.